Claude VonStroke: «Hay una ‘vibra’ diferente en Detroit»

Dj, productor musical y locutor de radio. El artista acaba de lanzar su álbum al mercado Live in Detroit.

Claude VonStroke es el productor de techn-funk que se encuentra detrás del sello Dirtybird Records. Nació en Detroit pero se mudó a San Francisco, donde es habitual verle subido a las cabinas de algunos de los clubs más reconocidos de la costa oeste amerinaca, expandiendo su característico y peculiar sonido chispeante, cargado de melodías sensuales.

¿Cómo fue tu primer contacto con el mundo de la música?
Cuando estaba en secundaria tenía mi propio programa de radio. Me encantada el hip-hop, que era la música emergente de la época. Cuando crecí comencé a ir a raves y a fiestas de música electrónica, así descrubrí que podías crear tu propia música sin necesidad de nadie más. Ya no necesitabas una banda o un grupo, por eso comencé a vincularme con la producción de house y techno.

Naciste en Detroit, ¿cómo ha influido la ciudad en tu carrera?
De no haberme mudado a Detroit no creo que me hubiera dedicado a esto. Mis amigos de allí y mi exposición constante a la música, gracias a los numerosos eventos que ofrece la ciudad, me ayudaron a crecer y me formaron musicalmente. Hay una vibra diferente en Detroit, es muy difícil de explicar y no siempre es algo bueno, pero es poderoso.

Eres el fundador de la discográfica Dirtybird Records, del programa de radio The Birdhouse y el campamento de Dirtybird, ¿qué proyecto te entusiasma más?
En su momento, lo que más deseaba era crear mi propia marca. Quería tener un respaldo donde publicar mi música y la de mis amigos. Sin embargo, diría que lo que más me entusiasma de todo es el campamento de Dirtybird. Allí puedo estar en contacto con la gente, pinchar, escuchar nueva música y ver el feedback real. Desde la discográfica te pierdes esa energía.

¿Cómo describirías el sonido ‘tech-funk’ de Dirtybird?
Es difícil describirlo, pero diría que es una mezcla de techno y house, con algunas vibraciones funk de los años 70. Imagina que James Brown y Bootsy Collins fueran productores de techno, el sonido que producirían sería algo parecido [ríe].

¿Cuál fue la reacción de la gente cuando lo escuchó por primera vez?
No le gustaba a nadie en San Francisco cuando comenzamos. Tuvimos que hacer verdaderos esfuerzos para encontrar un distribuidor que apoyara nuestra música. Lo encontramos en Frankfurt, Alemania. Aun así, había algunos fieles a la marca. Mi amigo Justin Martin comenzaba a ser un dj reconocido, lo que nos facilitó las cosas; sin embargo, no tuvimos ningún éxito real hasta nuestro tercer vinilo, mi disco Deep Throat. Vendimos una tonelada de vinilos y fue lo que nos permitió continuar.

«Trabaja hasta
que tus pistas sean increíbles. Ese es el consejo que le daría
a cualquiera que quiera empezar como dj»

Eres un icono dentro del mundo de la música electrónica, ¿cuál ha sido la parte más difícil de llegar hasta aquí?
He estado haciendo música durante mucho tiempo y diría que siempre van surgiendo dificultades en el camino. Es mucho trabajo: administración, papeleo, redes sociales…La parte de marketing ha crecido tanto que parece que lo devora todo. Siempre he sido un fanático de la buena música por encima de todo, así que trato de vivir de acuerdo con eso. Pero hay mucho más trabajo detrás como preparar eventos, lanzamientos y programas de radio. Mi esposa y yo siempre estamos trabajando para mejorar, es muy difícil separarlo de la parte creativa.

El año pasado sacaste un álbum de hip-hop con tu nombre real, Barclay Crenshaw,¿era un asunto pendiente?
Sí, me encanta la música, especialmente el hip hop de la vieja escuela y quería ver si podía hacerlo. He disfrutado mucho con este proyecto y he aprendido sobre producción de house y techno, aunque suene raro. Explorar nuevos ritmos músicales te ofrece la posibilidad de innnovar y aprender nuevos trucos de mezcla.

Tu próxima sesión en Eivissa será el próximo viernes en Music On junto a Marco Carola, ¿cómo te preparas?
Estoy emocionado. He ido a Music On muchas veces como fan, antes de que me llamaran para pinchar, por lo que es todo un honor. Trabajo mucho en mis shows y, precisamente como comozco la fiesta, no quiero llevar todo mi sonido Dirtybird. Prefiero amoldarme al estilo de Amnesia y demostrar que soy un dj con muchos registros.